Un banner es una pieza de comunicación muy utilizada en el marketing digital debido a su practicidad y su alcance. Podríamos trazar un paralelo: el banner es en el marketing digital lo mismo que una valla publicitaria en una publicidad de exteriores. Sus amplias posibilidades, lo han transformado en una opción muy utilizada para las campañas de comunicación y marketing digital. Conozcamos sus orígenes, los objetivos que persiguen y por qué implementarlo en una estrategia digital.

El primer banner data de octubre de 1994. El sitio Teads relata que “simplemente decía: “¿Alguna vez ha hecho clic con el mouse AQUÍ? LO HARÁ” y se publicó en HotWired.com, ahora más conocido como Wired.com, para una campaña de AT&T”.

Esa publicidad digital permaneció visible durante cuatro meses. Y debido a su impacto y novedad, clickearon en el banner el 44% de los usuarios que navegaron por el sitio. El porcentaje es impresionante y supera cualquier expectativa que hoy en pleno 2020 alguien podría soñar.

Hemos dicho que un banner es una pieza de publicidad digital. Dentro de ella se pueden combinar distintos elementos. Desde imágenes hasta vídeos, pasando por algunos más sencillos que solo ofrecen un texto hasta los que tienen juegos o cuestionarios. Sea cual sea el formato, un buen banner debe contener un llamado a la acción.

Esta pieza suele ubicarse en un lugar visible dentro de un sitio web, o bien arriba de una noticia en un portal de noticias o a los costados de un artículo. “Dada la gran presencia de los banners en internet, es muy importante hacer que esta creatividad se diferencie de la competencia para captar la atención del usuario”, señala en su artículo sobre los banners el sitio Cyberclick. Me permito agregar que además de competir con otros, el banner también compite con la atención prioritaria, al inicio, del contenido de la página web en la que reside. Por lo cual, desarrollar creativamente esta pieza gráfica se vuelve imprescindible.

El blog de Hubspot indica que un banner se ubica “en zonas de alto tráfico en sitios web, con el fin de crear conciencia de marca y generar clics, compras y clientes potenciales. Las ubicaciones de alta visibilidad incluyen la parte frontal, inferior o lateral de un sitio”.

Un banner debe llamar la atención de un usuario y lograr la acción que se propone, que es el click y el direccionamiento hacia otro sitio web de la marca anunciante. Para Human Level, “el objetivo fundamental es generar reconocimiento de marca y atraer tráfico hacia el sitio web del anunciante que paga por su inclusión”.

Para ello, es necesario poder pensar y crear un banner de forma estratégica. La estrategia ante todo, como solemos decir. Por qué cobra valor, en ese sentido, el planteo de Marketeros Hoy: “con anterioridad al diseño de un banner es conveniente, como si de otro proyecto se tratara, plantear los objetivos y estrategias de comunicación, así como definir  el mensaje idóneo que sirva de soporte para conseguir los objetivos deseados”.

No será lo mismo un banner que busque aumentar el tráfico que uno que persiga la conversión. En definitiva, pensar en el objetivo que se persigue debe ser un punto de partida para crear el banner.

Además del clásico banner rectangular, también es muy utilizado el estilo rascacielo, de formato vertical y alargado. Otro de los más famosos, debido a su invasión, es el pop up. Es aquel que emerge en el sitio, acaparando la totalidad de la pantalla y ofreciendo un producto o servicio. Este tipo de banner es el que peor fama tiene y resulta un boomerang para las marcas que lo emplean.

Si querés conocer más en profundidad sobre esto, te sugiero que leas la nota de Este Gráfico.

Existen distintos sitios donde se pueden crear banners para tu marca. Se trata de portales que facilitan herramientas de diseño muy sencillas e intuitivas. Una de las más recomendadas es Canva, donde se puede crear como en un lienzo blanco el banner que tu marca necesita. Otras de las opciones destacadas son Bannerflow y GifMaker.

El banner se ha convertido en una pieza muy recurrente en las estrategias de marketing digital. Su correcta utilización – mensaje atractivo más sitio correcto – pueden potenciar muchísimo el alcance de la comunicación de una marca. Dar con la fórmula perfecta consiste en analizar estratégicamente los objetivos que persigue la marca y las herramientas y presupuestos con las cuales se cuentan.

En el marketing digital podemos clasificar tres lugares donde se pueden colocar banners. En primer lugar, en los medios propios. Allí uno puede colocar un banner promocional de un producto dentro del sitio web de la misma marca. En segunda instancia, se puede ubicar un banner en una web de un tercero, a través de una alianza convenida. A este tipo se lo llama, medio ganado. Por último, existen los medios pagados, donde se conviene una suma de dinero a cambio de colocar un banner. En esta línea, se encuentran las campañas publicitarias en Google Display. Allí, Google elige donde ubicar el banner según los criterios de segmentación de audiencia y palabras claves a partir de los cuales se haya configurado la campaña.