Si el avance de las vacunas nos permite soñar con un futuro sin coronavirus, la comunicación nos ayudará a hacerlo más ameno.

Incertidumbre, dudas, confusión, contradicciones. El coronavirus no solo ha diseminado su potencia de contagio. A su paso, ha trastocado al mundo entero. Ha impactado en la subjetividad de cada persona pero también en el cuerpo social. En los gobiernos, en las instituciones, en las organizaciones, nadie ha salido inmune a la pandemia y sus efectos.

Si entendemos a la comunicación no como una representación del mundo sino como una herramienta para construirlo, será un buen punto de partida. Comunicar con empatía, transmitir confianza y seguridad, tanto al interior de las organizaciones como hacia fuera, serán claves para la post pandemia. En esta nota, tomaremos apuntes sobre cómo desarrollar una comunicación efectiva que realce tu marca o emprendimiento cuando pase el temblor…

Comunicación sin cuarentena

Si tu emprendimiento o marca puso en pausa su comunicación durante la pandemia, es porque no has seguido los consejos que vertimos en el artículo “Comunicar en tiempos de coronavirus”. La comunicación nunca entró en fase 1, ni en aislamiento social ni siquiera en distanciamiento. Con su potencia transformadora, la comunicación nos ayudó a acercarnos, alentarnos y brindar un marco de racionalidad durante la difícil coyuntura.

Las marcas y emprendimientos que desarrollaron una comunicación fluida y constante con su público habrán reforzado el vínculo que las une con ellos. Aún más cuando a pesar de las limitaciones de la situación actual hayan impactado en la actividad comercial. Si la comunicación siguió intacta e inmune a la crisis, esto habrá incrementado la empatía y la fidelidad de nuestro público.

Y no solamente hay que destacar la influencia de la comunicación externa. También al interior de instituciones y organizaciones, la comunicación juega un papel preponderante. Para aunar esfuerzos, mejorar dinámicas de trabajo que se alteraron con la pandemia o para brindar certezas dentro de un panorama incierto. Las empresas que lograron desarrollar una comunicación interna eficaz habrán logrado sortear los escollos que mencionamos recién.

Punto de inflexión

La pandemia ha entronizado algunas tendencias que ya venían en ascenso. El boom del E-commerce, el rol central del marketing digital o las ventajas del trabajo a distancia. Pero también funciona como un punto de inflexión en los planes empresariales, las dinámicas productivas y, por ende, laborales. Muchas empresas se encuentran rediseñando sus objetivos, misiones y equipos de trabajo. Estos movimientos que suelen ser ríspidos e inquietantes para las organizaciones pueden ser matizados si los procesos de diálogo interno y la comunicación entre los miembros están presentes de forma constructiva y sostenida.

Andrea Lie Iwamizu es Directora Sénior de Comunicación Corporativa. Lie Iwamizu indica que: “pocas organizaciones ya están seguras de que volverán a sus viejos modelos de trabajo y estructuras antiguas, y los cambios pueden ser necesarios o bienvenidos en un contexto donde todos buscan reanudar los ingresos, ajustar los gastos y reinventar el negocio para fortalecer su sustentabilidad”.

Tras describir este panorama y este punto de inflexión, Lie Iwamizu sostiene en este artículo que “las estrategias de compromiso interno más exitosas durante la crisis se basarán en escuchar las demandas colectivas e individuales y en el foco en las personas, y ayudarán a consolidar una cultura corporativa fuerte y verdadera”.

Claves para la post pandemia

Los desafíos para transitar exitosamente la post pandemia mucho tienen que ver con el propio escenario que ha montado el coronavirus y su impacto. Si el coronavirus ha traído cambios, incertidumbres, distanciamiento y desconfianza, las respuestas están en las antítesis. Será necesario dotar a las empresas de procesos claros, de compromisos estables y bien definidos y una comunicación interna aceitada y sostenible.

La difusión de la cultura organizacional, en un escenario novedoso, será exitosa si está apuntalada por la transparencia, la cercanía y la confianza. Conocer a nuestro público objetivo al dedillo, nos permitirá saber qué mensajes debemos fortalecer para fidelizar nuestro vínculo, así como también reforzar la confianza y seguridad que se necesitan para generar nuevas oportunidades de ventas.

Comunicar desde la empatía y a través de mensajes positivos, son postulados que cobran cada vez más importancia. “Es importante definir bien qué es lo que se quiere comunicar. Recordemos que la comunicación es una herramienta al exterior para mostrar los valores de una organización. También hay que pensar en el nuevo consumidor, diferente al de hace unos meses. Un consumidor con incertidumbre, e incluso con miedo, que ha cambiado sus conductas y la forma de relacionarse. Para ello, la comunicación, al igual, que durante la crisis, deberá continuar siendo transparente y basada en mensajes cercanos y positivos y adaptados al target al que nos queramos dirigir para ganar la confianza del público”, advierte el sitio Be-Confluence.

Conclusión

La comunicación post pandemia deberá cargar en su espalda el peso de crear escenarios más amenos, de confianza, transparencia y seguridad. Para que las empresas logren conectar con los nuevos consumidores será necesario establecer mensajes de cercanía, que inspiren confianza y sean positivos.

A su vez, desarrollar canales de comunicación constructivos y sostenidos al interior de las organizaciones será imprescindible para aunar esfuerzos y construir nuevas dinámicas.